(inspirado en “El Buscador” de Jorge
Bucay)
Un caminante
se acerca
a un pueblo pequeño.
Antes de llegar al mercado
cruza por un cementerio.
La curiosidad lo mataba,
así que se acercó
para leer las placas.
Juan Domínguez,
3 años y 2 meses.
Marta Romano
5 años y 4 días.
5 meses.
4 lunas llenas
gigantes y preciosas.
3,000 horas.
14,000,000
de hojas caidas.
365 vidas de mariposas.
“¿Es este un cementerio
de niños?”
El caminante lloraba,
seguía su camino.
En el mercado
todos trabajan tranquilos.
Al primero,
que por cortesía,
le ofreció un
“buenos días”
el caminante trató
de consolarle.
“Lo compadezco,
a todo el pueblo,
acabo de pasar
por su cementerio de niños.”
El cortés hombre,
lanzó una carcajada
cortante.
“No
hombre,
esos no eran niños.
Uno siempre da por hecho
lo que nos parece más sencillo.
Escuche bien,
que no es un chiste,
aquí la edad se cuenta
contando los días
que fuimos felices.”
Noel esto esta bello!!!!
ResponderEliminares la única manera de vivir con lo que importa. Gracias TurqueZa!
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